Crisis crediticia de 1772

Sobre

La Crisis Crediticia de 1772 fue un importante acontecimiento financiero que se originó en Londres y se extendió por toda Europa, afectando especialmente a Escocia y los Países Bajos. Se caracterizó por una rápida expansión del crédito y la banca, lo que dio lugar a la especulación y a prácticas financieras dudosas. La crisis comenzó en junio de 1772 cuando Alexander Fordyce perdió una cantidad sustancial especulando con acciones de la Compañía de las Indias Orientales, lo que provocó la quiebra de varios bancos. Esto provocó una escasez de liquidez y un drástico aumento de las quiebras, con graves consecuencias para el comercio y el crédito público. La crisis tuvo profundas repercusiones en la economía y la política de la época. Perjudicó a la Compañía de las Indias Orientales y a los plantadores de las colonias americanas, que luchaban por pagar sus deudas. El Banco de Inglaterra intervino facilitando crédito a corto plazo para estabilizar el mercado. La crisis influyó indirectamente en la Guerra de Independencia de Estados Unidos al exacerbar las presiones económicas sobre los plantadores coloniales. Marcó uno de los primeros casos en que el Banco de Inglaterra respondió al contagio financiero, sentando un precedente para futuras crisis bancarias. El evento destacó los riesgos de la especulación descontrolada y la importancia de la regulación bancaria.