El escándalo de Stormy Daniels (2018)

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El escándalo de Stormy Daniels involucra acusaciones de una aventura entre Donald Trump y la actriz de cine para adultos Stormy Daniels en 2006. En el período previo a las elecciones presidenciales de 2016, el abogado de Trump, Michael Cohen, pagó a Daniels 130.000 dólares para mantener la supuesta relación en privado. Este pago se realizó a través de una empresa fantasma, Essential Consultants LLC, que Cohen creó en octubre de 2016. El acuerdo incluía un acuerdo de confidencialidad para evitar que Daniels hablara públicamente de la supuesta relación. El escándalo cobró relevancia en 2018 cuando The Wall Street Journal informó sobre el pago. Cohen admitió posteriormente haberlo realizado, alegando que se hizo por orden de Trump para influir en las elecciones. Trump inicialmente negó tener conocimiento del pago, pero posteriormente reconoció haberle reembolsado a Cohen. El caso generó cuestionamientos legales y éticos sobre violaciones de las normas de financiación de campañas. Cohen se declaró culpable de los cargos relacionados, incluyendo violaciones de las normas de financiación de campañas, e implicó a Trump en el proceso. El escándalo ha sido un punto central en las discusiones sobre la ética y el cumplimiento legal de Trump durante su campaña presidencial.