Haz un 'contenedor sensorial'

Sobre

Crear un contenedor sensorial es una forma sencilla pero divertida de estimular los sentidos de los niños y fomentar la exploración. Un contenedor sensorial es básicamente un recipiente lleno de diversos materiales diseñados para estimular múltiples sentidos, como el tacto, la vista, el oído y el olfato. Entre los materiales de relleno más comunes se incluyen arroz seco, frijoles, arena, perlas de agua y papel picado. Estos materiales se pueden elegir según un tema o simplemente por su atractivo táctil. Para crear un contenedor sensorial, empieza por seleccionar un recipiente adecuado y llénalo con los materiales que hayas elegido. Añade pequeños juguetes o herramientas como palas y pinzas para mejorar la motricidad fina y la creatividad. Los contenedores sensoriales ofrecen numerosos beneficios, como un mejor desarrollo cognitivo, una mayor motricidad fina y una mayor conciencia sensorial. También proporcionan una plataforma para el juego cooperativo y el desarrollo del lenguaje, lo que los convierte en una herramienta valiosa en la educación infantil.