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La controversia sobre la tecnología de la línea de gol

Concepto

Sobre

La controversia sobre la Tecnología de Línea de Gol (TLG) comenzó con el gol anulado a Frank Lampard en el Mundial de 2010. Durante el partido de Inglaterra contra Alemania, el disparo de Lampard cruzó claramente la línea de gol, pero los árbitros no concedieron gol. Este incidente puso de relieve la necesidad de asistencia tecnológica en el fútbol para prevenir este tipo de errores. Tras ello, la FIFA y la International Football Association Board (IFAB) apoyaron la introducción de la TLG para mejorar la precisión en las decisiones de gol. Los sistemas TLG, como Hawk-Eye y GoalRef, utilizan ayudas electrónicas para determinar si el balón ha cruzado completamente la línea de gol. Si bien la TLG ha reducido las decisiones controvertidas, enfrenta críticas por su coste, su impacto en el desarrollo del juego y sus ocasionales imprecisiones. A pesar de estos desafíos, la TLG se sigue utilizando en las principales competiciones, mejorando la equidad y reduciendo el error humano en momentos críticos. Su implementación ha supuesto un paso significativo hacia la modernización del fútbol, aunque persisten los debates sobre su función y eficacia.