Parques solares flotantes

Sobre

Los parques solares flotantes, también conocidos como sistemas fotovoltaicos flotantes (FPV), consisten en instalar paneles solares en plataformas que flotan sobre cuerpos de agua como lagos, embalses y océanos. Esta tecnología maximiza el espacio disponible aprovechando la superficie del agua, reduciendo la necesidad de terreno que suelen requerir los parques solares tradicionales. El efecto refrigerante del agua mejora la eficiencia de los paneles solares, lo que se traduce en una mayor producción energética en comparación con los sistemas terrestres. Además, las instalaciones solares flotantes ayudan a reducir la evaporación del agua y pueden inhibir el crecimiento de algas al generar sombra. El proceso de instalación implica el anclaje de las plataformas flotantes al lecho acuático, lo que garantiza la estabilidad y una exposición solar óptima. Los parques solares flotantes ofrecen una doble ventaja: se combinan con sistemas hidroeléctricos y utilizan la infraestructura existente para almacenar y gestionar la producción solar variable. A pesar de los mayores costes iniciales, los sistemas FPV están ganando popularidad gracias a su eficiencia y sus ventajas medioambientales. Ofrecen una solución sostenible para la expansión de las energías renovables, especialmente en zonas densamente pobladas donde el terreno es escaso. A medida que avanza la tecnología, la energía solar flotante está llamada a desempeñar un papel importante en las transiciones energéticas globales.