
Uso del transporte público o la bicicleta
Concepto de transporteSobre
Usar el transporte público o la bicicleta es una estrategia clave para reducir las emisiones derivadas del uso de vehículos particulares. Los sistemas de transporte público, como autobuses y trenes, están diseñados para ser más eficientes y planificados, reduciendo el consumo total de combustible y las emisiones. Por ejemplo, los autobuses pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero hasta en dos tercios por pasajero en comparación con los vehículos privados[1][2]. El transporte público también promueve una mayor densidad de uso del suelo, lo que conserva el suelo y reduce las distancias de viaje[3]. La bicicleta ofrece otra opción respetuosa con el medio ambiente al eliminar por completo las emisiones. Tanto el transporte público como la bicicleta contribuyen a un medio ambiente más limpio y a comunidades más saludables. El transporte público reduce la congestión y promueve el desarrollo de uso mixto, mientras que la bicicleta promueve la actividad física y reduce la contaminación atmosférica. En general, estas alternativas a los vehículos particulares desempeñan un papel crucial en la mitigación del cambio climático y la mejora de la sostenibilidad urbana.