Curado al fuego

Sobre

El curado al fuego es un método tradicional utilizado en la producción de tabaco, especialmente para crear sabores distintivos en ciertos tipos de tabaco. Este proceso consiste en exponer las hojas de tabaco a fuegos latentes, generalmente de maderas nobles como el nogal americano y el roble, que les confieren un sabor ahumado y amaderado. Las hojas se cuelgan en graneros herméticos para maximizar la exposición al humo, permitiendo que el tabaco absorba los ricos aromas. El proceso de curado puede durar desde unos días hasta varias semanas, dependiendo del resultado deseado. El curado al fuego no solo añade sabor, sino que también reduce significativamente la humedad, lo que hace que el tabaco sea más combustible. Produce un tabaco bajo en azúcar y alto en nicotina, que aporta un toque picante a las mezclas. Este método es especialmente popular para los tabacos oscuros curados al fuego, que se utilizan a menudo en puros y algunos tabacos de pipa. El cuidadoso control de la temperatura y el humo garantiza que el tabaco conserve sus aceites naturales, mejorando su calidad general y su perfil de sabor.