Jamón Ibérico

Sobre

El jamón ibérico es reconocido por su excepcional calidad y su rico sabor a frutos secos. Proviene de la raza ibérica, autóctona de la Península Ibérica. Los cerdos suelen alimentarse con bellotas, lo que contribuye significativamente a su sabor distintivo. El proceso de curación consta de varias etapas, como la salazón, el lavado, el secado y la maduración, que suelen durar de varios meses a años. Este meticuloso proceso realza la textura y el sabor del jamón, convirtiéndolo en un preciado manjar de la gastronomía española. El jamón ibérico se clasifica en cuatro categorías según la dieta del cerdo y la pureza racial. La categoría más alta, el jamón ibérico de bellota, proviene de cerdos de raza pura alimentados con bellotas. Su curación dura al menos 36 meses, lo que da como resultado una textura tierna y deliciosa, y un sabor complejo. El jamón ibérico no solo es una delicia culinaria, sino que también ofrece beneficios para la salud gracias a su alto contenido en proteínas y grasas monoinsaturadas. A menudo se sirve cortado en rodajas finas a temperatura ambiente, lo que permite que sus sabores se desarrollen plenamente, y habitualmente se combina con vinos como el jerez y el Rioja.