Fermentación de soda

Sobre

La fermentación de refrescos es un proceso que crea bebidas carbonatadas mediante la fermentación de bases dulces con levadura. Este método implica el uso de microorganismos, como levaduras y bacterias lácticas, para consumir azúcares y producir dióxido de carbono como subproducto. El proceso de fermentación puede iniciarse con un cultivo iniciador, como el ginger bug, similar a la masa madre. El ginger bug se crea mezclando jengibre rallado, azúcar y agua, lo que permite la proliferación de bacterias silvestres y levaduras. Esta mezcla se añade a un líquido azucarado, como zumo de frutas o té de hierbas, para fermentar y crear un refresco gaseoso rico en probióticos. El proceso de fermentación suele constar de dos etapas: fermentación primaria y secundaria. Durante la fermentación primaria, la mezcla se deja fermentar en un recipiente no hermético durante unos días. Posteriormente, se transfiere a botellas selladas para la fermentación secundaria, donde el dióxido de carbono producido naturalmente genera presión y carbonata la bebida. La duración de la fermentación puede variar según el nivel de carbonatación deseado y el consumo de azúcar. Una vez que el refresco está suficientemente carbonatado, se refrigera para ralentizar la fermentación. Este método permite la creación de diversos sabores y puede ser una alternativa más saludable a las bebidas carbonatadas tradicionales, ya que contiene menos azúcares añadidos e introduce microorganismos beneficiosos.