Limita el consumo de cafeína y alcohol

Sobre

Limitar el consumo de cafeína y alcohol es crucial para mantener patrones de sueño saludables y un bienestar general. Ambas sustancias pueden alterar significativamente la calidad del sueño. La cafeína actúa como estimulante, bloqueando las sustancias químicas que inducen el sueño en el cerebro, lo que dificulta conciliar el sueño y reduce la calidad del sueño profundo[2][4]. El alcohol, si bien inicialmente induce somnolencia, interrumpe el sueño más tarde en la noche, provocando despertares frecuentes y un sueño menos reparador[2]. Evitar estas sustancias, especialmente antes de acostarse, ayuda a regular el ciclo natural de sueño-vigilia del cuerpo. Limitando el consumo de cafeína y alcohol también se reducen los riesgos para la salud asociados a su consumo combinado. Mezclar alcohol y cafeína puede enmascarar los efectos del alcohol, lo que provoca un consumo excesivo y un mayor riesgo de accidentes, intoxicación etílica y problemas cardíacos como latidos irregulares e hipertensión arterial[1][3][5]. Es recomendable evitar la cafeína al menos ocho horas antes de acostarse y el alcohol al menos cuatro horas para garantizar una mejor calidad de sueño y reducir los riesgos para la salud[2][4]. Al controlar la ingesta de estas sustancias, las personas pueden promover hábitos de sueño más saludables y reducir el riesgo de diversas complicaciones de salud.